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‘La flor que picó la abeja’, una exposición que aborda las dinámicas en las relaciones humanas

Luego de haber sido expuesta en Nueva York, Adriana Marmorek presenta ‘La flor que picó la abeja’ en la Galería Espacio Alterno Uniandinos, en Bogotá.


'La flor que pico la abeja' hasta el 21 de septiembre, en La Galería Espacio Alterno de Uniandinos  /ARTERIA
'La flor que pico la abeja' hasta el 21 de septiembre, en La Galería Espacio Alterno de Uniandinos /ARTERIA

Con más de dos décadas de investigación centrada en el deseo humano, la artista Adriana Marmorek presenta su exposición ‘La flor que picó la abeja’, un conjunto de obras que nacieron durante el confinamiento de la pandemia y que evidencian un universo de extrañas y sensuales criaturas que se ubican entre los animales, las flores, las frutas y, también, los artefactos.


Esta exposición fue abierta en la Galería Nohora Haime, en Nueva York, un día antes de que esa ciudad fuera ‘cerrada’ por la pandemia. /Cortesía
Esta exposición fue abierta en la Galería Nohora Haime, en Nueva York, un día antes de que esa ciudad fuera ‘cerrada’ por la pandemia. /Cortesía

El nombre de la exposición hace alusión a las relaciones sexuales de las personas, “de alguna manera, está haciendo un guiño a este relato descontinuado de las flores y las abejas”, dice Marmorek. La artista hace alusión a la manera como durante muchos años en generaciones pasadas los adultos intentaban explicar a los niños la sexualidad.


Cada obra fue ubicada de tal manera que genera un diálogo con el espacio de la galería, y con las otras obras y sus características, como el color, por ejemplo. De hecho, los colores vibrantes y las formas configuran una alegoría al nombre de la exposición. La artista bogotana ha utilizado diferentes técnicas en su exhibición como la fotografía propia, fotografía intervenida, esculturas, piezas bordadas y video.


Mira la entrevista con Adriana Marmorek

sobre su obra y esta exposición

El deseo, el placer y el amor han sido la línea de trabajo de Marmorek, que no limita su discurso a lo erótico sino que también lo lleva a terreno de lo social, la historia y cuestiona con él el imaginario occidental.



Sin embargo, es consciente de que el misterio es un factor determinante en las relaciones humanas y no pretende evadirlo ni descifrarlo. Más bien, señala que resulta clave para la configuración misma de la existencia del amor, y es lo que lo hace inasible y a la vez que haya sido buscado por hombres y mujeres desde siempre.


Tanto el amor y como la sexualidad han estado presentes también en otras propuestas de su carrera, que han sido vistas, por ejemplo, en el Museo de Arte Moderno de Bogotá (‘Háblame de amor’, 2017-2018). Sus propuestas también han estado en la Feria Arco (Madrid, 2015) en la primera sección ‘Sitio’, de Artbo (2015) y estuvo nominada al IX Premio Luis Caballero.


Curiosamente, esta exposición fue abierta en la Galería Nohora Haime, en Nueva York, un día antes de que esa ciudad fuera ‘cerrada’ por la pandemia. La galerista dejó encendidas las luces a propósito las luces del lugar para que los pocos transeúntes –usualmente aquellos que tenían permisos para circular o quienes sacaban a sus mascotas– la pudieran apreciar, pero Marmorek nunca pudo verla.

El deseo, el placer y el amor han sido la línea de trabajo de Marmorek,/Cortesía
El deseo, el placer y el amor han sido la línea de trabajo de Marmorek,/Cortesía

La exposición estará abierta al público hasta el 21 de septiembre, en La Galería Espacio Alterno de Uniandinos ubicada en la Calle 92 # 16-11 de Bogotá. Los espectadores podrán cuestionarse y ver desde propias percepciones bajo una lente distinta desde la curiosidad en un horario de 10 a.m. a 6 p.m.

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