Febrero 19 de 2019
Una foto sublime del momento triste que vive Colombia
Una foto del reportero grĆ”fico Sergio IvĆ”n Acero Yate (āSergio Ćngelā) en la Plaza de BolĆvar, durante el paro nacional, puede llegar a ser en una obra icĆ³nica no solo de la fotografĆa sino del momento que vive el paĆs.
Mayo primero de 2021
DIEGO GUERRERO
Editor
ARTERIA
Es probable que la foto del reportero grĆ”fico Sergio IvĆ”n Acero Yate (āSergio Ćngelā) tomada en los enfrentamientos entre manifestantes y el Esmad de la PolicĆa, en la Plaza de BolĆvar de BogotĆ”, se convierta en una obra icĆ³nica no solo de la fotografĆa sino del momento que vive el paĆs.
El fotĆ³grafo bogotano de 27 aƱos, que trabaja hace tres para la agencia colombiana de noticias Colprensa, creĆ³ una imagen tan vĆvida, dramĆ”tica y desgarradora de los sucesos del pasado 28 de abril, durante el paro nacional, que usuarios de las redes sociales la han reproducido sin cesar.
āEstĆ”bamos en la esquina oriental del Palacio de Justicia en el momento en el que los disturbios empezaron con mayor fuerza. Nosotros (los fotĆ³grafos) casi siempre estamos en grupo āpor seguridadā y nos dimos cuenta de que en ese punto confluĆa bastante gente enfrentĆ”ndose con el Esmadā, cuenta āAngelā.
La foto ha generado todo tipo de comentarios en las redes. Uno de ellos es el de āLa Negris Ruiz Torresā, una usuaria de Facebook que contĆ³ el anĆ”lisis que hizo junto con una amiga. āLa imagen tiene bastante informaciĆ³n que la hace muy buena. Hasta en la baranda del lado de los policĆas estĆ” la palabra āmalā, como dejĆ”ndolos de ese lado de la escena,la actitud de confrontaciĆ³n, de agresiĆ³n, de fuerza, de luchaā¦ La entidad pĆŗblica (el Congreso) al fondo, completa, centradaā¦ā.
Ella recuerda como las dos se dieron cuenta de que, aĆŗn en medio de semejante caos, la institucionalidad sigue intacta, centrada en la fotografĆa y tambiĆ©n de ālo Ć©pico, la confrontaciĆ³n en sĆ misma entre jĆ³venes con sus elementos de ataque (o defensa) como las muletas y la patinetaā, agrega.
Tiene tantos elementos la foto que podrĆa pensarse que fue construida, pero, desafortunadamente para este paĆs, no lo es. āEn esa parte de esa esquina ācontinĆŗa el fotĆ³grafo al explicar cĆ³mo logrĆ³ la imagenā hay un balconcito pequeƱo que da para unas ventanas del Palacio de Justicia. AhĆ vi que estaba muy cerquita del tropel y para seguridad y poder trabajar en la mitad de todo, me subĆ al balcĆ³nā.
El pintor Guillermo LondoƱo fue uno de los que comentĆ³ en redes sociales e hizo un paralelo entre la foto y el Ć³leo de JoaquĆn Sorolla Defenda del parque de la artillerĆa de MonteleĆ³n (1884). āLa foto me encantĆ³. Es proporcionada y cuenta una historia que podrĆa ser en cualquier parte del mundo, en ParĆs o Los Ćngeles, pero que se da en la Plaza de BolĆvar, de BogotĆ”. Es la historia de un conflicto contemporĆ”neo.
āPara mĆ, es la repeticiĆ³n de circunstancias a travĆ©s de la historia. En el cuadro de Sorolla, uno ve que el pueblo vestido normal es el que estĆ” enfrentado a un ejĆ©rcito, a una fuerza que estĆ” con su uniforme y sĆmbolos de poder jerĆ”rquicosā.
Otro ejemplo, dice, es Francisco de Goya que āplasmĆ³ al pueblo humilde y luchador, que no era necesariamente rural sino urbano, que protestaba, entre otras cosas, por el derecho a la dignidad, a trabajar en condiciones de derechos humanosā, recuerda LondoƱo.
Siguiendo con Sorolla, dice: āUno ve la pintura de Sorolla āque tiene hoy mĆ”s de cien aƱosā y mi punto de reflexiĆ³n es que no cambiamos mucho. SĆ, en que una protesta, de golpe, puede reducir ciertas injusticias del IVA o los impuestos a la canasta familiar y concientizar a una clase polĆtica de la afectaciĆ³n que tiene en un momento de esta pandemia una tributaciĆ³n exagerada para la gente mĆ”s vulnerable.
āPero, es muy lamentable que tenga que haber una insatisfacciĆ³n tan gigantesca que obligue a la gente, como hace tantos aƱos, a salir a manifestarse. Uno pensarĆa que si las sociedades fueran mĆ”s avanzadas, liberales y humanistas no tendrĆan que ver esta pintura de Sorolla, hoy, en la Plaza de BolĆvar.
āEsta imagen podrĆa ser muchos sitios en Singapur o Alemania, pero no quita que sea desastroso lo que estĆ© pasando y que no aprendemos. ĀæPor quĆ© tenemos que salir a gritar a las calles que algo estĆ” mal? No deberĆamos llegar a ese punto. Hay muchas lĆ³gicas que tendrĆan que darse, mucho antes de salir ahogados a decir que el pueblo estĆ” pasando hambre, desempleo e injusticiaā, culmina LondoƱo.
La foto de un paĆs
āSergio Ćngelā, parado en el balconcito, veĆa como la multitud se acercaba al Esmad. āCuando me subĆ al punto que te digo, me encontrĆ© con esa escena. Ya se estaban dando ahĆ. Al final la gente se acercĆ³ mĆ”s al Esmad y, prĆ”cticamente, se estaban dando puƱo directo.Eso quiere decir que el pueblo aguantĆ³ el gas y se enfrentaron cara a cara con el Congreso de fondoā, recuerda el fotĆ³grafo.
Eduardo Serrano, crĆtico y curador destaca como la foto tiene tanto de artĆstico como de informativo y como hace una lectura no solo de la manifestaciĆ³n sino de la situaciĆ³n del paĆs.
āEs una foto muy bien encuadrada, con el Capitolio con esa tela negra luctuosa, la multitudā¦ y, luego, esa nota roja (la persona con chaqueta roja o anaranjada) en el medio de la fotografĆa, me parece estupenda. Uno ve gente, una sombrilla y veo la PolicĆa acercĆ”ndose con los escudos adelanteā¦
āMuy elocuente de lo que estĆ” sucediendo en Colombia. La protesta de la gente furiosa. AtrĆ”s, la bandera colombiana en el BolĆvar y la gente gritando. Me parece muy artĆstica, con ese aspecto de reportero grĆ”fico que reconoce lo que pasa rĆ”pidamente. Me recuerda La libertad guiando al pueblo (Delacroix, 1830), aunque esa obra tiene menos gente. La fotografĆa traduce una gran tensiĆ³n entre uno y otro bando, es decir la tensiĆ³n de lo que se estĆ” viviendoā.
El reconocido fotĆ³grafo Fernando Cano coincide en que la foto captura una imagen que muestra mĆ”s que un grupo de seres humanos en una disputa. āA veces, en Ć©ste mundo atiborrado de imĆ”genes, aparece una fotografĆa que lo tiene todo para dar testimonio fiel de una Ć©poca.
"Esto acaba de ocurrir en BogotĆ”, la capital de un paĆs que va pasando por su tercer pico: el de la pandemia, el de la desigualdad social, el de un gobierno que ademĆ”s de incompetente resultĆ³ cĆnico al pasar una Reforma Tributaria contra las clases mĆ”s desatendidas. Tercer pico de una rabia popular que crece. āColombia hoyā podrĆa haberse titulado la imagen de āSergio Ćngelā, de Colprensaā, dice.
Para cuando āĆngelā buscaba hacer sus fotos, varios compaƱeros de otros medios tambiĆ©n trataban de obtener imĆ”genes en medio del maremĆ”gnum. Con algo de modestia āĆngelā explica: āEn ese momento creo que la parte estĆ©tica de la foto es de mucha suerte tambiĆ©n.
"Yo empecĆ© a disparar la cĆ”mara: uno tiene presente quĆ© estĆ” aconteciendo alrededor de uno; estĆ” velando por la propia seguridad, pensando en cĆ³mo obturar, la velocidad, la apertura del diafragma, todo. Son muchas cosas y no te da tiempo de pensar bien las cosas. AhĆ tomĆ© esa fotoā.
Guillermo Vanegas, crĆtico y curador, opina de la foto: āCreo que esa fotografĆa es como la Ćŗltima cena de la comedera de mierda en la que nos tiene el gobierno. Ahora mismo veo como el Esmad ataca a los jĆ³venes, echan las motos encimaā¦
"Yo creo que una imagen de esas es lo suficientemente poderosa como para enseƱarle, ni siquiera al gobierno, sino a los soldados y policĆas, que le apuntan a la gente de su misma generaciĆ³n y de su misma clase social, que el camino no es por ahĆ. Un policĆa, ademĆ”s de obedecer Ć³rdenes, puede aprender a no ser un asesino, por ejemplo. Esas imĆ”genes sirven para eso.
āEs sublime. Es como realismo trĆ”gico, como una sĆntesis de la situaciĆ³n en la que estamos abocados porque el paĆs decidiĆ³ continuar en guerra civil, ahora trasladada a las ciudades. Yo me preguntarĆa en quĆ© instituciĆ³n se podrĆa albergar para coleccionarla, no tanto como arte, āaunque yo la comprarĆa como una obra de arteā sino para configurar memoria sobre el genocidio que se estĆ” cometiendo acĆ”, en el paĆs. Y en ese sentido va muy lejos.
āSi ahora que instituciones internacionales estĆ”n fijĆ”ndose en la producciĆ³n visual colombiana, si el Museo de Arte Moderno de Nueva York la adquiriera, la imagen darĆa buena cuenta, tanto del entorno que vivimos como de la gente que es capaz de ver esa crisis y extraer de ahĆ imĆ”genes significativas. Mostrar la barbarie del Estado acĆ”ā, opina Vanegas.
Tras los enfrentamientos, el fotĆ³grafo finalmente encontrĆ³ un momento para ver quĆ© habĆa logrado. āCuando lleguĆ© a la casa vi que tenĆa una metĆ”fora muy fuerte en la representaciĆ³n de la Fuerza PĆŗblica, el pueblo, el Congreso de fondoā¦ y sabemos que los que tienen que tomar las decisiones son ellos (los congresistas). En la casa me di cuenta de que era una bella imagen. Yo no tengo mucha seguridad sobre mi trabajo āno sĆ© si les pasa a todos los fotĆ³grafosā entonces empecĆ© a ver que mucha gente empezĆ³ a utilizarla, y yo: Ā”peroā¦!ā.