Febrero 19 de 2019
Indígenas de 14 comunidades se reúnen en Caño Mocuelo en torno al arte con el artista Pedro Ruiz
Niños, jóvenes, mujeres y mayores de 10 pueblos indígenas, representados por 14 comunidades colombianas participaron en el taller ‘Oro vital’, para promover la comprensión de quiénes somos y la reconstrucción de nuestra identidad por medio del arte.
11 de agosto de 2020
El taller fue realizado en el resguardo indígena Caño Mochuelo, en la Orinoquía colombiana y en él participaron integrantes de los pueblos Amorúa, Maibén Masiware, Piapoco, Sáliba, Sikuani, Tsiripu, Wámonae, Yamalero y Yaruro; recibieron el taller con el acompañamiento del artista Pedro Ruiz y un grupo de formadores expertos.
“Basándonos en el arte más básico, el taller se dispuso como un espacio para representar y transmitir, a través de pinturas y cartografías corporales, la relación de los pueblos con su entorno y su cultura”, explica Ruiz.
El resguardo se encuentra ubicado en las sabanas inundables de la Orinoquía, lugar donde confluyen los ríos Meta y Casanare. Allí –dice– conviven 14 comunidades de 10 de los 115 pueblos indígenas con los que cuenta el país.
El taller en Caño Mochuelo se convirtió en una apuesta para tejer puentes entre los valores de la conservación de la naturaleza y el desarrollo sostenible de los valores de la autonomía territorial y la cultura tradicional de los pueblos indígenas, con el objetivo de apoyar en la búsqueda de soluciones que aprovechen el potencial del diálogo intercultural.
Este ejercicio hace parte del programa Riqueza Natural, primer programa de gran escala de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, enfocado en la conservación de la biodiversidad de ecosistemas únicos y amenazados del Caribe y la Orinoquía colombiana, el cual se realizó en alianza con la Junta del Cabildo Indígena.
El taller también fue un espacio para apoyar y visibilizar los problemas de esas comunidades, con idea de alertar a las instituciones públicas y la sociedad civil frente a la necesidad de proteger la cultura y la conservación de la biodiversidad de este territorio de riqueza única.
Hernaldo Rivey Umeje Joropa, gobernador del resguardo Caño Mochuelo alerta sobre el peligro de desplazamiento físico y cultural de estas comunidades debido a que estos pueblos, muchos de ellos nómadas y seminómadas, recorrían un territorio tradicional de más de 3 millones de hectáreas, a través de corredores de importancia biológica y cultural, pero, hoy, sólo cuentan con algo más de 94 mil hectáreas, las cuales permanecen parcialmente inundadas durante cerca de 7 meses al año.
Esta situación limita seriamente la seguridad alimentaria de los pueblos y de las futuras generaciones indígenas.
Una característica del trabajo de Ruiz es que se ha enfocado en la naturaleza y su relación con la sociedad como componente prioritario en gran parte de sus obras, motivo por el cual fue invitado a ser el director creativo de la exposición ‘Resguardo Caño Mochuelo: universo en peligro’.
De hecho, la serie ‘Oro-espíritu y naturaleza’, de Ruiz se expone en diferentes embajadas, consulados y lugares del mundo como imagen representativa de la biodiversidad y la cultura de Colombia.
A partir de ella se ha consolidado el proyecto pedagógico y artístico conformado por talleres de arte para niños, jóvenes y adultos llamado ‘Oro vital’, un ejercicio que promueve la comprensión de quiénes somos y la reconstrucción de nuestra identidad conectando al arte con nuestra inocencia”, dice el artista.
De manera simultánea, para la exhibición, Ruiz desarrolló tres obras, con el propósito de recaudar fondos para apoyar la formación de líderes indígenas del resguardo y fortalecer su organización interna.
Una de ellas es Riqueza Natural que muestra a un grupo de sabios indígenas sobre una canoa rodeada de morichales y que, junto a toda la producción de obras desarrolladas durante el taller, esperan a ser adquiridas para, con lo recursos obtenidos, continuar con el fortalecimiento organizacional y el mejoramiento de prácticas de conservación de la biodiversidad en este territorio.
Por su parte el gobernador del resguardo invita a que usemos este portal web y a ver la exhibición como una oportunidad para acercarnos a esa Colombia olvidada por el Gobierno, que lucha por conservar su territorio y la biodiversidad en la que habita.
Recalca que se requiere del esfuerzo mancomunado de varias instituciones, grupos de trabajo comprometidos y respaldo gubernamental para que, por medio de pequeños esfuerzos, se sumen en la recuperación de los corredores bioculturales necesarios para la sostenibilidad ambiental y social de este territorio y se viabilice la adecuación de las condiciones de vida en que se encuentran estos pueblos.
Además el confinamiento, la articulación de la medicina tradicional y medicina occidental y las condiciones del área del Resguardo, en abandono por el Estado Colombiano, dificulta el emprendimiento de proyectos o programas que atiendan a las dificultades de estos pueblos.